Boston, 03 de feb. (CSFmag) – El joven velocista estadounidense Quincy Wilson, de tan solo 17 años, dejó al mundo del atletismo impresionado al conquistar el título en los 400 metros de pista corta del prestigioso evento New Balance Indoor Grand Prix, celebrado en Boston, Massachusetts. Con un tiempo de 45 segundos y 66 centésimas, Wilson no solo venció a corredores experimentados, sino que también rompió el récord mundial sub-18 y registró la mejor marca de la historia en esta categoría.
El récord anterior pertenecía al noruego Bastian Elnan Aurstad, quien había establecido un tiempo de 47 segundos y 04 centésimas en 2022. Con esta hazaña, Wilson superó dicha marca por una diferencia significativa de más de un segundo, consolidándose como una de las promesas más brillantes del atletismo mundial.
El New Balance Indoor Grand Prix, uno de los eventos más importantes del calendario atlético bajo techo, reunió a algunos de los mejores competidores internacionales. A pesar de su juventud, Quincy Wilson demostró un nivel de madurez y preparación excepcional, enfrentándose a rivales con mayor experiencia y logrando un rendimiento que lo posiciona como el futuro del atletismo en Estados Unidos y el mundo.
El éxito de Quincy Wilson no es casualidad, ya que su talento ha sido evidente desde temprana edad. Originario de Estados Unidos, el joven velocista ha acumulado victorias en competiciones juveniles y mayores, pero esta última actuación marca un antes y un después en su carrera. Los expertos ya lo catalogan como una figura que podría dominar las competencias de velocidad en los próximos años, especialmente en los eventos de 400 metros y relevos.
Para América Latina, donde el atletismo ha ganado cada vez más seguidores, el desempeño de Wilson es una señal del impacto que las nuevas generaciones están teniendo en el deporte. Su ejemplo podría inspirar a jóvenes atletas de la región a perseguir sus sueños con determinación y dedicación.
El récord mundial sub-18 conseguido por Wilson no solo resalta su capacidad como velocista, sino que también pone en evidencia cómo las nuevas tecnologías de entrenamiento y el enfoque en el desarrollo integral de los deportistas están transformando el panorama del atletismo global.
Con este histórico triunfo, Quincy Wilson entra en los libros de historia del atletismo y deja una promesa clara: el futuro de la velocidad está en manos de la juventud.
Foto: Erik Aguilar | Correr Sin Fronteras
